Monseñor Ángel Pérez Pueyo, obispo de la diócesis de Barbastro-Monzón, con el asesoramiento y apoyo de la Curia diocesana, ofrece a los fieles las siguientes indicaciones en relación con la situación generada por la extensión del Covid-19, y que se suman a las ya comunicadas y articuladas el pasado viernes, 6 de marzo:
- Siguiendo las directrices de las autoridades sanitarias y en la misma línea de actuación de las administraciones regional, provincial y locales, se han suprimido o aplazado, al menos hasta el 29 de marzo, las catequesis de todos los niveles y en toda la diócesis, las conferencias, encuentros y jornadas formativas.
- El Museo Diocesano suspende las actividades y procede al cierre de sus instalaciones desde esta misma tarde. Del mismo modo, quedan anuladas las visitas turísticas a la Catedral de Barbastro, Roda de Isábena y Obarra, así como a otros templos, iglesias o ermitas.
- Cáritas Diocesana suspende clases, talleres y todas las actividades previstas, hasta el día 30, y establece una serie de actuaciones de prevención en su servicio de acogida.
- El Obispado de Barbastro Monzón cierra sus instalaciones, incluyendo el Archivo. Para cuestiones de urgencia, se atenderá en el teléfono 670 458 681.
- Siguiendo las indicaciones y los protocolos dictados por las autoridades competentes y mientras no se disponga lo contrario, la actividad sacramental en los templos y parroquias de nuestra diócesis continuará con normalidad.
- En el caso de los funerales, se recomienda limitar la asistencia a familiares y allegados.
- Pedimos a las personas mayores y enfermas que se unan espiritualmente a la celebración de la santa misa a través de los distintos medios de comunicación.
- En el caso que resultase imposible la celebración pública de la misa, rogamos a los sacerdotes que la continúen celebrando unidos a toda la Iglesia y rogando por los enfermos, los que los cuidan y el personal sanitario.
- Pedimos que los sacerdotes sigan atendiendo espiritualmente a todos los enfermos y que todos los cristianos sigamos practicando las obras de misericordia que caracterizan un modo de vida según el Evangelio.
- En cuanto a los oficios litúrgicos y procesiones de Semana Santa, se tomarán las decisiones oportunas en función de cómo se vayan desarrollando los acontecimientos y de acuerdo con las recomendaciones de nuestras autoridades.
El obispo pide a todos los fieles que no olviden a los más vulnerables y les anima a hacer suya la oración del papa Francisco, recordando a los fallecidos, a los enfermos y a todos aquellos que tienen encomendado su cuidado.
“Oh María, tú resplandeces siempre en nuestro camino como signo de salvación y de esperanza.
Nosotros nos confiamos a ti, Salud de los enfermos, que bajo la cruz estuviste asociada al dolor de Jesús, manteniendo firme tu fe.
Tú, Salvación de todos los pueblos, sabes de qué tenemos necesidad y estamos seguros de que proveerás, para que, como en Caná de Galilea, pueda volver la alegría y la fiesta después de este momento de prueba.
Ayúdanos, Madre del Divino Amor, a conformarnos a la voluntad del Padre y a hacer lo que nos dirá Jesús, quien ha tomado sobre sí nuestros sufrimientos y ha cargado nuestros dolores para conducirnos, a través de la cruz, a la alegría de la resurrección.
Bajo tu protección buscamos refugio, Santa Madre de Dios. No desprecies nuestras súplicas que estamos en la prueba y libéranos de todo pecado, o Virgen gloriosa y bendita”.