Opinión

Ángel Calvo Cortés

La fe de un amigo científico

19 de noviembre de 2025

He tenido, y tengo todavía, más de una docena de amigos científicos. La mayoría son creyentes, otros afirman que no lo son y algunos simplemente diría que son analfabetos en religión. Quiero recordar hoy a Manuel  José López Pérez, biólogo molecular, Rector de la Universidad de Zaragoza, cristiano manifiesto, fallecido el 18 de marzo de 2018. Ya sabemos que la fe es vivida por una persona concreta con sus circunstancias personales incluidas, en este caso su formación y su trabajo como científico. Durante una conferencia suya,  titulada “El sentido de la realidad y de la vida” (2017), Manolo daba estas explicaciones de su fe cristiana. Te cuento algunas cosas que él dijo textualmente.

Mi realidad vital, mi inquietud por encontrar sentido y razón de mi vida, de la vida de los hombres, de mi planeta y de la existencia, me conduce a ir aceptando y conviviendo con un Dios origen, evolución y sentido de una realidad que me hace comprender la ciencia, con una conciencia integradora de Dios y la realidad comprensible,

Nuestro origen. Somos hijos de las estrellas, Hijos de la vida, Hijos del hombre. Hijos del entorno.

Hijos de las estrellas. Nuestras partículas elementales, nuestros átomos ¿Por cuántas estrellas, por cuánto universo han viajado? Hijos de la vida ¿Cuántas veces empezó la vida en nuestro universo? ¿Dónde empezó? ¿Cuántas especies, cuántos seres vivos se han extinguido? Hijos del hombre ¿Cuántas especies de homínidos, cuántas especies humanas, cuántas emigraciones, cuántos hombres y mujeres, han hecho falta para estar hoy aquí? Hijos del entorno.  El entorno, nuestros alimentos, el clima, nuestra sociedad, condicionan lo que somos hoy. Hasta llegar a mí.

La ciencia es un metalenguaje de la filosofía. Puede hablar de toda la realidad. Puede hablar de todo lo que signifique materia y energía y sus procesos Pero no del sentido. Solo la conciencia humana puede plantearse el sentido.

No soy positivista. El positivismo afirma que lo que no puede ser observado no existe. Esta concepción es científicamente indefendible, ya que es imposible hacer afirmaciones válidas sobre lo que la gente ‘puede’ o ‘no puede’ observar. Equivale a decir que ‘sólo existe lo que observamos’, lo cual, evidentemente, es falso’ decía Albert Einstein

A modo de resumen de mis reflexiones, escribe Manolo: Dios es origen, cambio y sentido. Es el amor presente en la realidad. Es libertad y autonomía. Es el bien y la justicia. Es belleza. Y está comprometido con todo esto. Y la ciencia es necesaria para comprender nuestra realidad, que es la más razonable expresión de Dios. Yo no sé por qué el mal existe, pero sé que el mal y el dolor es el coste de la libertad y la autonomía y yo quiero ser libre.

Gracias por tu luz, Manuel

Muchos creen que los científicos tienen que ser necesariamente ateos, pero otros científicos opinan que la ciencia puede acercar más a Dios y hasta algunos afirman que “creen en Dios gracias a la ciencia, no a pesar de la ciencia”. Para el tema fe-ciencia, puedes visitar el blog DIOS Y LA CIENCIA.

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