Estamos de enhorabuena, se nos nota en la cara a todos los diocesanos, porque el pasado domingo, 25 de noviembre, fueron ordenados de diácono de la Iglesia dos jóvenes en nuestra bendita Diócesis de Teruel y Albarracín.
En una Catedral llena de fieles, Freddy Narváez y Wilberto García sumaron un paso más en su decisión de ser sacerdotes del Señor y con gran alegría le manifestaron que cuente con ellos.
Nuestro obispo, don Antonio Gómez, visiblemente emocionado, dio gracias por haber ordenado a tres sacerdotales, dos diáconos y un diácono permanente en estos dos años que lleva con nosotros, y expresó su alegría de haber recogido este fruto que sembraron otros, pero que tenemos que seguir sembrando, e invitó a los asistentes a animar a jóvenes y niños a ir al seminario.
Freddy y Wilberto agradecieron la presencia de todos los diocesanos que quisieron acompañarlos en este hermoso día y se acordaron, especialmente, de sus familias, tanto las que pudieron asistir como las que les siguen con sus oraciones en sus tierras de origen.
Como dice el lema pastoral de este año “Somos Comunidad Orante” y por ello rogamos a todos una sincera oración a Nuestro Señor por estos jóvenes que están preparados para servir al Pueblo de Dios.