La iniciativa, pionera entre las diócesis españolas, se enmarca dentro de su Plan de Transparencia y del proyecto ‘San Valero, de par en par’, queriendo mostrar no solo números, sino los rostros de las personas y la identidad de las comunidades que en el día a día realizan la misión de la Iglesia zaragozana, que celebra el VII centenario de su elevación a sede metropolitana.
Cada uno de los capítulos de la Memoria presenta testimonios de personas reales que explican el porqué de su compromiso cristianos para con la sociedad aragonesa. Entre los datos ofrecidos se encuentra el de las 277 parroquias de la diócesis, así como otros 25 centros pastorales permanentes. La labor de estos sería imposible sin la colaboración de 586 sacerdotes, 1.447 catequistas o la de los 70 voluntarios que acuden a los centros penitenciarios de Zuera y Daroca para realizar un servicio de acompañamiento a las personas privadas de libertad y a sus familias. Otro ejemplo: 3.300 personas acompañadas en los hospitales por voluntarios laicos, que dejan cada año casi de 30.000 horas dedicadas a los enfermos
Junto a estas actividades, hay que destacar la presencia de la Iglesia en la escuela y en otras instituciones educativas. Es significativo, en palabras del ecónomo diocesano, Jaime Sanaú, que “en nuestra archidiócesis mantengamos 104 centros educativos de ideario católico, con 5.148 profesores y 57.714 alumnos. Con ello, y según datos del Ministerio de Educación, ahorramos al estado 4.000 euros por alumno”. La Iglesia también está presente en los niveles universitarios. Por ejemplo, con la Universidad San Jorge, donde se han dedicado más de dos millones de becas propias, al servicio de los 1.973 alumnos.
“Aunque la Iglesia no es una empresa o una ONG”, como señala el papa Francisco, los católicos zaragozanos acompañaron durante 2016 a más de 25.000 personas en 46 centros sociales y asistenciales. ¿Qué tipo de acompañamiento? Centros de orientación familiar y de ayuda a madres solteras (404 personas), centros para mitigar la pobreza (9.976 personas), hospitales religiosos (3.177 personas), centros de tratamiento de drogodependencias (1.441 personas), centros de atención y tutela de menores (413 personas), centros de promoción de la mujer y atención de víctimas de violencia doméstica (518 personas), centros de orientación y búsqueda de empleo (7.852 personas), atención a mayores y discapacitados (4.434 personas). “Todo esto, sin contar los 491.960 desayunos, comidas meriendas y cenas distribuidas en centros parroquiales o de congregaciones religiosas”, indicó Sanaú en el acto de presentación, al tiempo que destacaba la entrega de los 1.100 voluntarios de Cáritas y 160 de Manos Unidas.
Impacto de los bienes inmuebles y de las fiestas religiosas
El último capítulo de la Memoria es el dedicado a la actividad cultural. En él se presentan los datos del impacto
del turismo asociado a los bienes inmuebles de la Iglesia católica en el PIB de Aragón (millones de euros): 825,24 de impacto directo; 369,25 de impacto indirecto; 466,99 de impacto aducido. Lo que supone un impacto total de 1.671,49 millones de euros. Los mismo se puede decir del impacto de las fiestas religiosas en el PIB de Aragón: un total de 451,23 millones de euros.