“Somos una gran familia contigo” es el lema de la campaña del Día de la Iglesia Diocesana, que se celebra el próximo 11 de noviembre. “Contigo, no lo dudes, seremos mejores, estaremos todos y nos constituiremos en una verdadera auténtica familia toda la diócesis de Barbastro- Monzón”, afirmó el obispo Ángel Pérez, en la presentación de esta jornada en la que se invita a los diocesanos a ser corresponsables en su labor y sostenimiento. “Muchos pocos hacen más que pocos muchos”, subrayó del obispo, Ángel Pérez, que apuesta por una “revolución eclesial a fuerza de ternura y comunión” posible gracias al incremento de las personas que se suman a esta corriente transformadora como verdaderos “apóstoles de calle”.

“Cientos de colaboradores en nuestra diócesis hacen posible el milagro de la fraternidad”, destacó, subrayando el voluntariado como una de las principales vías de colaboración, de forma sencilla y anónima, con la actividad diocesana. El año pasado, se celebraron 427 bautizos, 539 comuniones, 305 confirmaciones y 117 matrimonios, sacramentos que se administran gracias a la labor de los 64 sacerdotes y 113 religiosos, ayudados 233 catequistas. La acción de Barbastro-Monzón llega a 247 parroquias, cuatro monasterios y seis centros educativos católicos, además de 27 centros sociales y asistenciales en los que se prestó atención en 2017 a 13.250 personas. Y aquí, de nuevo, la labor de los 400 voluntarios de Cáritas y 40 de Manos Unidas resulta fundamental para atender las necesidades cercanas y también los dos proyectos de cooperación al desarrollo en marcha.

La Iglesia optimiza sus recursos

Esa importante implicación en el día a día de la diócesis tiene también su reflejo en el sostenimiento de sus actividades, mediante donativos puntuales o suscripciones temporales, herencias o legados, permitiendo que a medio plazo se alcance la autogestión para seguir realizando la actividad diocesana. “Queremos estar seguros de poder ayudar a los más necesitados”, señaló Ángel Pérez, que recordó que a través de www.donoamiiglesia.es se puede donar y escoger el destino concreto de la donación. En este sentido, señaló la vice ecónoma, Marta Calavera, cada cien euros donados suponen una desgravación de 75 en la declaración de la renta. Y, además, “cada cien euros que se dan a la iglesia repercuten como 237, porque la Iglesia optimiza los recursos como nadie”, añadió el ecónomo, José María Huerva.

Los optimiza y los da a conocer con total transparencia, emprendiendo un proceso de auditoría que en su primera etapa ha analizado la Curia, el Museo Diocesano, El Cruzado Aragonés y el Seminario, para continuar, en una segunda, por los cuatro arciprestazgos. “Estamos muy agradecidos porque estamos dejando una administración modernizada y saneada que funcionará casi sola. Ahora hay que seguir trabajando para que la gente sienta la diócesis como la madre”, concluyó Huerva.