Se trata del segundo reparto en menos de un mes, que se suma a los 50.000 euros distribuidos a finales de mayo con el objetivo de ayudar a quienes están sufriendo con más fuerza la actual crisis económica. En total, el fondo de emergencia creado por el arzobispo Vicente Jiménez Zamora ha recaudado cerca de 100.000 euros.

Acompañar a las personas más vulnerables, siendo, como pide el papa Francisco, un “hospital de campaña” que no deja a nadie tirado en la cuneta. Con este objetivo, desde que comenzó la crisis del coronavirus, la archidiócesis de Zaragoza redobló su labor sociocaritativa para ayudar a los damnificados y luchar contra los efectos de la pandemia a través de Cáritas, de los comedores parroquiales, de las residencias diocesanas de mayores o de la Mesa de la Hospitalidad.

Ante el aumento de las necesidades, el arzobispo Vicente Jiménez Zamora creó el ‘Fondo de Emergencia COVID-19’, que ha recaudado cerca de 100.000 euros. Tras una entrega inicial de 50.000 euros a finales del pasado mes de mayo, el Consejo Diocesano de Asuntos Económicos ha acordado, a propuesta del ecónomo diocesano, un segundo reparto de 40.000 euros:

  • Comedor de la Parroquia de San Pedro Arbués: 10.000 euros. Ampliación del comedor familiar y ayuda para el alquiler de una furgoneta para el reparto de alimentos.
  • Residencia de Ancianos de la Parroquia de Nuestra Señora del Portillo: 10.000 euros. Paliar la disminución de ingresos (al no cubrirse las bajas de residentes) y ayudar a la financiación del aumento de gastos asociados a la pandemia.
  • Fundación Canónica O.D. Santo Domingo de Silos: 10.000 euros. Ayudas a las familias para seguir las actividades docentes online, adquisición de material de protección.
  • Guardería laboral «Nuestra Señora de la Rosa» (Parroquia de San Miguel Arcángel de Casetas): 5.000 euros. Pago de gastos fijos que se devengan pese al cierre temporal de la guardería.
  • Patronato Nuestra Señora de los Dolores: 5.000 euros. Ayuda para el reparto de alimentos a familias y para la adquisición de arcones congeladores y dos combis para mantener los productos en perfecto estado.

El dinero procede de las donaciones de sacerdotes, comunidades de vida consagrada y seglares, a raíz de la campaña ‘Hazlo Posible Zaragoza’, que seguirá abierta durante todo el mes de junio. Los donativos permiten desgravar tanto en el Impuesto sobre Sociedades como en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y pueden realizarse mediante transferencia a la cuenta bancaria de Ibercaja ES67 2085 0101 1303 3104 6011 o a través de BIZUM, con el código 38393.

Al servicio de la sociedad

La Iglesia diocesana asume la responsabilidad de mover a los católicos y a quien desee sumarse a seguir colaborando. En la web de la campaña, www.hazloposiblezaragoza.es, se ofrecen —de un modo visual y con una narrativa dinámica— un elenco de ‘Historias con alma’. Son testimonios concretos de una institución que está comprometida con la sociedad, como muestra la atención brindada en hospitales, cementerios, residencias de mayores, centros de atención a la mujer, a las familias, etc.

Asimismo, la página ofrece una sección, ‘Por tantas razones’, que refleja en veinte puntos el trabajo de la Iglesia durante esta crisis al servicio de la sociedad y del bien común. Entre otras, destacan la atención a personas en riesgo de exclusión, el reparto de comida a temporeros en zonas agrícolas, la confección de mascarillas para el personal sanitario, la atención espiritual (tanto presencialmente como por teléfono) y el acompañamiento a personas mayores.