En el marco del Año Jubilar, la Diócesis de Barbastro-Monzón celebró, el 15 de noviembre, el Jubileo de los Coros, una jornada que unió música, fe y comunidad en uno de los templos jubilares diocesanos: el Monasterio del Pueyo. Más de 70 personas, entre coros parroquiales y agrupaciones vinculadas a la vida cristiana, se sumaron esta convocatoria, convertida en un encuentro musical y espiritual.
La jornada comenzó con el encuentro en la Plaza del Sol, seguido de una peregrinación rezando el Rosario hasta el monasterio, cumpliendo así uno de los requisitos para obtener el jubileo. Tras la bienvenida del obispo y de la delegada de Celebración, el sacerdote Esteban Trejo ofreció una formación sobre música y liturgia, orientando sobre qué cantos son más adecuados en cada tipo de celebración.
Tras un descanso con café y pastas, los participantes prepararon los cantos de la eucaristía, presidida por don Ángel y concelebrada por varios sacerdotes y los monjes de El Pueyo. A continuación, los asistentes compartieron una comida fraterna, con la colaboración de varios cofrades de Barbastro.
Ya por la tarde, el Jubileo de los coros se dio la mano con el Noviembre Solidario que organiza la Junta Coordinadora de Cofradías de Barbastro. Fue en un concierto-oración en la iglesia de los Escolapios que, bajo el título Peregrinos de esperanza, combinó música, oración y reflexión, en lo que será una prueba piloto para futuras actividades similares y no se descarta replicarlo en otras localidades.
Con este encuentro como impulso, los coros ya preparan el repertorio navideño y la clausura del Año Jubilar.
