Durante el 2020, la Iglesia en España desplegó 680 nuevas acciones para hacer frente al Covid-19. Las acciones fueron de cuatro tipos: asistenciales, sanitarias, educativas y pastorales.

El secretario general, Mons. Luis Argüello, y la directora de la oficina de Transparencia, Ester Martín, presentaron el miércoles 11 de mayo de 2022, la Memoria anual de actividades de la Iglesia 2020. Esta memoria recoge en este año datos de 392 indicadores de toda la actividad de la Iglesia en torno a 150.000 registros. Por décimo año consecutivo, una empresa independiente, PwC, revisó externamente la memoria, comprobando la exactitud de los datos. Toda la información de la memoria puede consultarse en el portal de transparencia de la Conferencia Episcopal, con la información actualizada y con las series históricas, en consonancia con la Ley 19/2013 de Transparencia y buen gobierno.
LABOR SOCIAL
La labor social de la Iglesia se intensifica y se multiplica con motivo de la pandemia. Durante 2020, la Iglesia en Espa-ña desplegó 680 nuevas acciones motivadas por el Covid 19. Esas acciones fueron de cuatro tipos: asistenciales, sanitarias, educativas y pastorales o de acompañamiento.
ACTIVIDAD ASISTENCIAL
Al margen de la pandemia, más de 4 millones de personas fueron atendidas en 2020 en los centros asistenciales y sanitarios de la Iglesia. Los sacerdotes, religiosos y seglares dedicaron en 2020 más de 41 millones de horas a la actividad pastoral de la Iglesia: acompañamiento, catequesis, formación o celebraciones.
IGLESIA Y EDUCACIÓN
La actividad educativa que desarrolla la Iglesia, en 2.419 centros concertados supone un ahorro al Estado de 3.895 millones de euros y da servicio a más de un millón y medio de alumnos. Además, la Iglesia dedicó en 2020 más de 52 millones de euros a 471 proyectos de construcción, conservación y rehabilitación del patrimonio. En los últimos 8 años ha empleado 511 millones de euros en el cuidado y conservación del patrimonio.
ASIGNACIÓN TRIBUTARIA
El aumento de las declaraciones a favor de la Iglesia ha permitido que el importe recaudado para la acción de la Iglesia fuera el segundo mayor desde el inicio de la Asignación Tri-butaria (297,68 millones).