La diócesis de Tarazona celebró ayer la Jornada de la Vida Consagrada con el rezo de las Vísperas en el Monasterio de las MM. Concepcionistas de Borja, que estuvieron presididas por el obispo de la diócesis, Mons. Eusebio Herández Sola. Este año la Jornada llevaba el lema “La Vida Consagrada, con María, esperanza de un mundo sufriente”.
El Sr. obispo vistió ayer el hábito de Agustino Recoleto, orden a la que pertenece, y estuvo acompañado por sus hermanos, los novicios del convento de Agustinos Recoletos de la localidad navarra de Monteagudo que, además fueron los encargados de cantar en la celebración de Vísperas.
A la oración asistieron integrantes de las distintas órdenes religiosas de la diócesis y sacerdotes. Fue un encuentro fraterno donde se compartió la gratitud por la Consagración recibida, el compromiso de ser testigos en el mundo y la alegría que produce sentirse «enviado de Dios para ofrecer su amor de la mano de María».
Por la mañana, la emisora Radio María retransmitió la misa del convento de las MM. Clarisas de Borja y las MM Capuchinas de Calatayud celebraron una solemne eucaristía con motivo de la Jornada.
