Cada año, el martes después de Pentecostés, Pascua granada, los fieles de Valle Vió (Buerba, Vio, Sercue, Nerin, Fanlo), incluidos Puyarruego y Belsierre, se reúnen en la cueva de Añisclo para venerar la memoria de San Urbez, un pastor que vino de tierras francesas y se santificó cuidando rebaños de estás altas tierras del pirineo aragonés, en la zona del Sobrarbe.

Hoy la celebración fue muy emotiva por la presencia de nuestro pastor, el Obispo de Barbastro-Monzón, y el regocijo de los devotos al contarle al Obispo lo que San Urbez ha significado para cada uno de ellos. Estuvo la representación de todos y cada unos de los devotos, ya que por las exigencias sanitarias así lo requieren. Pero aunque estuvimos pocos estábamos todos los fans de San Urbez en una ermita muy querida donde se celebra la eucaristía unas cuatro o cinco veces al año. Es una gran alegría ver que el santo sigue congregando a muchos vecinos en la fraternidad y la amistad.

José Alejo Díaz- Párroco de Boltaña y su grupo