El obispo de Tarazona, Mons. Eusebio Hernández Sola, ha inaugurado la rehabilitación de la sede de Cáritas Interparroquial de Calatayud. El edificio, ubicado en la calle Baltasar Gracián, data del siglo XVI y ha sido mejorado atendiendo a las necesidades de la entidad.
Cáritas ha invertido casi 400.000 euros en la rehabilitación de la planta calle y la primera planta del edificio, principalmente para suprimir barreras arquitectónicas. Se ha actuado en una parte del edificio, en espacios destinados a la atención a usuarios, el reparto de alimentos y salas de almacenaje, dividiendo las dependencias de tal manera que se garantice la privacidad de las personas. A partir de ahora la acogida y la entrega de alimentos a usuarios se realizan en la planta calle, quedando la zona superior dedicada a almacenaje de alimentos y otros servicios.
La presidenta de Cáritas Interparroquial en Calatayud, Aurora Lassa, ha agradecido al equipo de voluntarios que cada semana prestan asistencia en estas instalaciones: «Cada día llegan personas por falta de alimentos, problemas de empleo, riesgo de exclusión social… Nuestra finalidad es mejorar la atención y con esta mejora vamos a poder hacer un mejor acompañamiento y asistencia«. La presidenta ha recordado la labor de los grupos en las parroquias, al arquitecto y a la empresa que ha ejecutado los trabajos.
Fernando Alegre, arquitecto redactor del proyecto de rehabilitación, ha ofrecido unas palabras explicando el valor del edificio histórico. Según Alegre, la actuación ha tenido en cuenta las prioridades de la labor asistencial de la institución mejorando la accesibilidad, el almacenaje de alimentos y la acogida.
Por último, el obispo ha bendecido el edificio destacando la labor de la entidad: «Cáritas es la imagen más bella de la iglesia», ha remarcado.