Durante la celebración del Corpus Christi, Mons. Vicente Rebollo, obispo de Tarazona, ha recordado que “con la comunión, tomamos a Jesús, y algo grande sucede en nuestra vida. Esta solemnidad nos ayuda a no olvidarlo”. En su homilía, ha destacado el valor profundo de la Eucaristía como presencia real de Cristo en el pan y el vino, y ha subrayado que “al recibir a Cristo, descubrimos el compromiso de la caridad: dar la vida por los demás, especialmente por los más débiles”.
Mons. Rebollo también ha hecho referencia al Día de Cáritas, enlazando la celebración litúrgica con el testimonio de amor al prójimo: “La Eucaristía nos compromete a vivir la caridad con los demás. Es una tarea hermosa ser esperanza para quienes no la tienen”. Inspirado por el pasaje evangélico de la multiplicación de los panes y los peces, recordó el mandato de Jesús: “Dadles vosotros de comer”, invitando a vivir con generosidad y entrega.
Ha expresado su gratitud a las instituciones y a todas las personas que colaboran con Cáritas para aliviar el hambre y la pobreza: “Gracias por vuestro donativo, vuestra oración y vuestro tiempo. Se necesitan muchas manos para repartir el pan a quienes no lo tienen”. Finalmente, ha animado a los fieles a fortalecer el corazón con el deseo de ser esperanza para todos, recordando que “la falta de paz no se encuentra solo en las guerras, sino también en los corazones inquietos. Donde hay una persona, hay esperanza”, ha concluído.
El Coro de la Catedral ha cantado en la celebración a la que ha asistido el alcalde de Tarazona y miembros de la corporación.
