Un equipo de la delegación diocesana de Educación ha participado este fin de semana en el Jubileo de la Educación que se ha celebrado en Roma.
El sábado 1 de noviembre, solemnidad de Todos los Santos, se reunieron todos los peregrinos en la Plaza de San Pedro de Roma para celebrar juntos la Eucaristía. Allí dieron gracias al Señor por el compromiso de todos los que tienen en el corazón el futuro de las jóvenes generaciones (familias, educadores, instituciones…) y lanzaron un poderoso llamamiento para que la educación sea creadora de fraternidad, de paz, de justicia.
Fue el momento culminante de muchos proyectos e iniciativas que, en todas partes del mundo, animan ya los lugares de la educación, empezando por las escuelas y las universidades, católicas y no católicas. En estas vastas comunidades, millones de personas, de culturas diferentes, están comprometidas en la construcción de su propio proyecto de vida: ¡La educación es verdaderamente un acto de Esperanza!