Barbastro celebró la festividad del Corpus Christi con una solemne eucaristía en la S.I. Catedral, en la que participaron numerosos fieles. Entre ellos, destacaron los niños y niñas que recientemente recibieron su Primera Comunión y sus familias, con los que el obispo se encontró previamente, en la sacristía, para rezar juntos y prepararse para la misa. A ellos y a sus familias dedicó don Ángel su homilía, haciendo partícipes a los más pequeños del profundo significado de la festividad.
Tras la eucaristía, dio comienzo la procesión por el centro de Barbastro. La Cofradía del Santísimo Sacramento (Minerva), la más antigua de Barbastro fundada en 1561, volvió a custodiar al Santísimo, portado por el sacerdote de la Unidad Pastoral Juan José Herrera, bajo un palio de cuatro varas. El recorrido llevó la custodia desde la Catedral hasta la plaza de San Francisco, arropada por la fe y el respeto de los asistentes, y acompañada por los comulgantes y los presidentes de las cofradías de Semana Santa -entre ellos Mariano Rodríguez, quien se estrenaba como presidente de la Junta Coordinadora-, y autoridades locales.
Aquí, ante el altar instalado en lo alto de las escaleras del templo, el obispo animó a los niños y niñas a lanzar los últimos pétalos de flores sobre Jesús y a rezar juntos repitiendo «Jesucristo, quédate».
Relevo en La Minerva
Como es preceptivo, el pasado miércoles, en la víspera de la celebración del Corpus, se realizó el tradicional relevo de prior entre los doce cofrades de la Minerva. En esta ocasión, Ricardo Peirón asumió el cargo rotatorio, sucediendo a Manuel Carreño. Además, Antonio Carvajal fue nombrado bolsero y se incorporó como cofrade Miguel Ángel Sasot, continuando así con la rica historia y tradición de esta antigua cofradía.