La imagen del Sagrado Corazón de Jesús nos recuerda el núcleo central de nuestra fe: todo lo que Dios nos ama con su Corazón y todo lo que nosotros, por tanto, le debemos amar. Jesús tiene un Corazón que ama sin medida. Y tanto nos ama, que sufre cuando su inmenso amor no es correspondido.
La Iglesia dedica todo el mes de junio al Sagrado Corazón de Jesús, con la finalidad de que los católicos lo veneremos, lo honremos y lo imitemos especialmente en estos 30 días. De manera especial el grupo de personas que formamos el Apostolado de la Oración de Báguena (“Red Mundial de Oración del Papa”) lo celebramos y adoramos durante los nueve días anteriores a su fiesta, llegando a su culmen el viernes posterior a la celebración del Corpus Christi: día grande en honor del Sagrado Corazón de Jesús.
Este año 2023, dedicado a la oración como preparación del Jubileo de la Esperanza del 2025, estamos invitados a hacernos más humildes y a dejar espacio a la oración que brota del Corazón de Cristo. Es Él, “escuela de oración”,quien sabe poner en nuestros corazones y en nuestros labios las palabras justas para ser escuchados por el Padre. Esto significa que debemos vivir este mes demostrándole a Jesús con nuestras obras que lo amamos, que correspondemos al gran amor que Él nos tiene y que nos ha demostrado entregándose a la muerte por nosotros, quedándose en la Eucaristía y enseñándonos el camino a la vida eterna.
Tener en casa o en el trabajo una imagen del Sagrado Corazón de Jesús, nos ayuda a recordar su gran amor y a imitarlo en este mes de junio y durante todo el año. Adoramos el Corazón de Cristo porque es el corazón del Verbo encarnado, del Hijo de Dios hecho hombre.
Parroquia de Báguena