Lola Esteras, directora de Cáritas diocesana: «Lo que más se demanda es trabajo»

De la mano de la directora de Cáritas Diocesana de Tarazona, Lola Esteras, vamos a conocer un poco más del trabajo de la organización. Actualmente, Cáritas Diocesana de Tarazona cuenta con trece trabajadores y 187 voluntarios.

-¿Cómo está afrontando Cáritas de Tarazona la situación de pandemia?
El momento actual es complicado y se han incrementado las demandas. Desde Cáritas se intenta atender las necesidades y dar solución o paliar estas situaciones.

-¿Cuáles son los ámbitos en los que trabaja Cáritas Diocesana de Tarazona?
Trabajamos en distintos programas: el de Empleo e Inserción, a través de A Todo Trapo y las tiendas R-Estrena y Arropados, en el que se facilita orientación e intermediación laboral y formación para el empleo. Es el más demandado y al que le dedicamos más recursos.
Tampoco nos olvidamos de los inmigrantes con el programa “Vida en Común”, del servicio de acogida, escucha y acompañamiento con “Acompañándonos”, y con todo lo relacionado con la formación, el voluntariado y la animación comunitaria rural, donde están los voluntarios que son piezas clave para este proyecto que denominamos “Avanzamos. Haciendo camino entre todos.” Otros programas que tenemos en marcha son el de personas Sin Hogar y el de comunicación y sensibilización para dar a conocer situaciones de injusticia y con los que se quiere promover el compromiso solidario.

-¿Qué es lo que más se demanda?
Ya comentaba antes que se han incrementado todas las demandas, pero la mayor es la de trabajo ya que las personas lo han perdido. Además, las ayudas sociales llegan con bastante demora o incluso hay personas que no tienen acceso a ellas. También se solicita asesoramiento, ayudas económicas o incluso para rellenar documentación. Las personas también solicitan ser escuchadas, recibir apoyo emocional y orientación sobre recursos públicos. Por otro lado, se detecta también rechazo de los autóctonos hacia las personas inmigrantes y también entre ellas. Nos preocupa bastante este rechazo. En este tiempo, también se ha incrementado el número de familias que reciben alimentos y ayudas para necesidades básicas, sobre todo para vivienda, pago de alquileres, facturas de luz, calefacción. Además, el perfil de las personas que demandan empleo ha cambiado notablemente, ya que son personas con una vida laboral normalizada que se han quedado sin trabajo. Y se ha incrementado el número de españoles.

¿Se siente Cáritas Diocesana desbordada?
Sí, nos sentimos desbordados con el trabajo, sobre todo a nivel de los profesionales de los diferentes proyectos porque, entre otras cosas, los requisitos para acceder a ayudas o subvenciones cada vez son más. A esto hay que añadir que muchos voluntarios al ser personas de riesgo por edad y por la pandemia no pueden colaborar todo lo que desearían. Permíteme que aproveche esta oportunidad para agradecer y reconocer la labor encomiable de todas las personas voluntarias y de los grupos parroquiales de la diócesis. Gracias a todos.

-Cáritas sigue apostando por la formación y la promoción para el empleo.
Si, seguimos apostando por la formación como herramienta para la promoción de las personas, intentando el apoyo para conseguir el trabajo que desean y necesitan. Además de los dos talleres de Inserción Socio Laboral, en el que participan de 12 a 14 personas, se dan cursos de Atención socio-sanitaria, Carnet de carretillero, Instalación y mantenimiento de jardines, Empleo Doméstico, y para el año 2021 implementamos Ayudante de cocina, que ya llevamos a cabo en años anteriores, y Mantenimiento de piscinas de uso comunitario.
En empleo, durante este año 2020 se han atendido a 200 personas de las cuales, el 20% han encontrado trabajo. De las catorce participantes en A Todo Trapo, dos de ellas han conseguido un empleo.

-¿Es ahora más necesaria la colaboración de las instituciones?
En nuestro caso, a nivel general, ha disminuido la colaboración recibida de las instituciones y cada vez son mayores las condiciones y requisitos solicitados. Aumenta la burocracia, las justificaciones son más exigentes. Todo esto es bueno para ser más transparentes, pero no se reconoce el tiempo y el trabajo que ello requiere. Como dato de transparencia, en la web de Cáritas Tarazona se puede consultar la auditoría que cada año se realiza en nuestra entidad.