Comenzamos el Consejo Diocesano de Pastoral el pasado domingo de Pentecostés, 28 de mayo, a las 17.00 horas en el nuevo Salón de Conferencias del Seminario Conciliar, orando ante el evangelio del soplo del Resucitado sobre los discípulos, infundiéndoles al Espíritu Santo, y proclamando la Secuencia de Pentecostés. En esta sesión del Consejo había un único punto del día: valorar y votar las aportaciones que 18 grupos han aportado al borrador del Plan diocesano de Pastoral, que está repartido en tres apartados: dimensión espiritual, comunitaria y misionera. Este borrador se ha de presentar para su aprobación a la Asamblea Diocesana del próximo 17 de junio.
Tras la aprobación de cada una de las aportaciones se plantearon algunas cuestiones importantes, como el repensar la organización de las Delegaciones: que sean menos ideales y más operativas. También se ha de abordar una nueva configuración de las unidades pastorales o agrupaciones de parroquias, que tendrían que contar con sus respectivos “equipos de animación pastoral” integrados no sólo por sacerdotes, sino también por hombres y mujeres, pertenecientes al laicado y a la vida consagrada. Este mapa de unidades pastorales ya está estudiándose por los sacerdotes de la Diócesis.
Finalmente, se ha valorado muy positivamente el trabajo sinodal y la posibilidad de que tantas personas hayan podido participar libremente, tomando el compromiso de estar atentos a no disminuir esta participación.
Juan Pablo Ferrer
Vicario para la Evangelización