La catedral de Teruel acogió el sábado pasado un concierto de la Orquesta Reino de Aragón y del Coro Amici Musicae, que interpretaron Cantos de pleamar del compositor turolense Antón García Abril y la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven.
Esta actuación forma parte de los conciertos extraordinarios en conmemoración del 25 aniversario del Auditorio de Zaragoza, que comenzaron el viernes en la Sala Mozart y que terminaron ayer en el Palacio de Congresos de Huesca, todos ellos con el mismo programa.
El Auditorio de Zaragoza se ha convertido en un referente para la escena cultural aragonesa desde que iniciara su andadura el 5 de octubre de 1994 con el concierto inaugural a cargo de la Orquesta y Coro Nacionales de España bajo la dirección de Davir Parry.
Fiel a su objetivo primordial, que es el de promover la cultura y el conocimiento y difusión del patrimonio musical, ahora ha querido celebrar su 25 aniversario con tres conciertos extraordinarios, uno de ellos el celebrado en la Catedral de Teruel.
