El 31 de octubre el colegio diocesano «Las Viñas» se llenó de alegría y esperanza con la festividad de Todos los Santos. Desde el departamento de Pastoral se propuso la idea de celebrar este día y ya el curso pasado se invitó a venir con algo blanco, pero este año se quiso darle más relevancia con gran acogida en las familias.
Prácticamente todo el alumnado vino vestido de color blanco representando la luz y además sesenta y cinco niños y niñas de primaria estuvieron caracterizados de su santo favorito y pudieron desfilar delante de todos recibiendo un fuerte aplauso.
La actividad consistió en tres partes:” Bautizados”,” Llamados” y “Enviados”, siguiendo el lema de la Asamblea Diocesana que tuvo lugar en el colegio hace un mes. A las 12:30 acudieron todos a la zona donde está la Virgen de las Viñas y allí, tras la bienvenida inicial, se rezó su oración recordando que estamos llamados a la santidad. Después comenzó el desfile de santos, tras una breve explicación por parte de cada uno, que relataron detalles incluso desconocidos para algunos de los presentes.
Hubieron santos populares como San José y la Virgen María, san Antón o san Francisco, santa Teresa de Calcuta y santa Teresa de Jesús, pero también algunos más desconocidos como santa Inés, san Blas de Armenia o san Pancracio. No faltaron el papa Francisco y san Juan Pablo II, así como una corte de ángeles de la guarda. El alumnado de Educación infantil vestido de angelitos cerró el desfile.
En la segunda parte, “Llamados”, organizados por clases, los alumnos de primaria se repartieron imágenes de santos y tuvieron que hacer una puesta en común sobre cada uno. Durante una semana hubo un trabajo previo en las clases de religión y demostraron que ya los conocen muy bien.
Por último” Enviados”. No podemos quedarnos quietos, salimos a llevar el mensaje de Jesús, como lo hizo San Pedro, el primer papa y del que se dice que tiene las llaves del Cielo, por eso se salió a buscar la llave de nuestro curso que nos abra el cielo. Llave que previamente se había escondido con el nombre del curso y con la palabra AMOR en los distintos rincones de aprendizaje del Proyecto Terra, como en el de música, bilingüismo o matemáticas.
Una vez encontrada tuvieron un premio de chuches y se pasó al photocall en el recibidor del teatro para hacer la foto de grupo y así se dio por finalizada la actividad.
Sin duda, una fiesta para repetir en años próximos en la que seguro que hay más participación si cabe de niños disfrazados de su santo favorito.
