La labor de Cáritas nunca se toma vacaciones pero, cada año, a final de curso, su gran familia se reúne para evaluar, planear y compartir. Como es tradicional, trabajadores y voluntarios de Cáritas se reunieron el primer sábado de junio en Bruis en una jornada con dos dimensiones: la de la asamblea, en la que se dio cuenta de los objetivos, acciones y proyectos, y la celebrativa, que proporciona momentos para compartir, charlar e intercambiar experiencias.
El obispo diocesano participó en la jornada, que incluyó las intervenciones de la delegada de Caridad, el director y la secretaria de Cáritas, además de las aportaciones de los trabajadores. A continuación, don Ángel presidió la eucaristía, con los sacerdotes John Mario Moná, Wilson Páez y Antonio Alcántara, antes del almuerzo en el pinar.
En el horizonte más inmediato está la campaña institucional del Corpus, que este año se desarrollará bajo el lema “Mientras haya personas, hay esperanza” e incluye la colecta prevista para el domingo 22 de junio. Cáritas propone salir al encuentro de los demás, especialmente de los más pobres, comprometerse con el bien común y cultivar la solidaridad en comunidad. La campaña invita a la comunidad cristiana a ser una «comunidad de conmovidos» que defienda la dignidad de las personas más vulnerables.