Cerca de 800 jóvenes de las diócesis aragonesas participarán en el Jubileo de los Jóvenes, uno de los grandes acontecimientos del Año Santo 2025. Bajo el lema «Peregrinos de esperanza», este encuentro internacional reunirá del 28 de julio al 3 de agosto a miles de jóvenes y adolescentes de todo el mundo en Roma, en una cita pensada para renovar la fe, compartir la alegría del Evangelio y fortalecer el sentido de pertenencia eclesial.
El encuentro promete ser una experiencia de fe, comunión e impulso misionero para miles de adolescentes de todo el mundo. Desde Aragón, las delegaciones de pastoral juvenil ultiman los preparativos con ilusión, conscientes del valor evangelizador de este tipo de propuestas.
Entusiasmo y camino
Desde la Archidiócesis de Zaragoza partirá la delegación más numerosa, con 495 jóvenes. Raquel Lucea, responsable de pastoral juvenil, destaca el ambiente de ilusión y compromiso: «Muchos están muy implicados en sus parroquias. Roma no debe ser una meta, sino un punto de partida para caminar como discípulos misioneros».
La diócesis de Huesca participará con 124 jóvenes, junto a los de Barbastro-Monzón y Tarazona. Isabel Ramos valora el crecimiento de la pastoral juvenil en los últimos años: «Tras la pandemia hemos visto cómo aumentaban los grupos y el deseo de compartir la fe. Los jóvenes buscan comunidad».
Desde Barbastro-Monzón viajarán 68 jóvenes. Carlos Loncán, delegado interino, explica que están en una etapa de transición pastoral: «Mantenemos propuestas como las “Noches Claras” y hemos iniciado nuevas adoraciones. Confiamos en que esta peregrinación motive a algunos a asumir responsabilidades y renovar la pastoral».
Desde Teruel y Albarracín, serán 50 los jóvenes que participen.
En Tarazona, aunque la delegación será más pequeña —seis jóvenes—, la participación es fruto de un trabajo constante. César Augusto Gómez, delegado diocesano, subraya la importancia de acompañar a quienes, tras completar su iniciación cristiana, se marchan a estudiar fuera: «Vamos dando pasos junto al plan pastoral y con el impulso de nuestro obispo, don Vicente Rebollo. Este Jubileo es un paso más en ese camino».
Un programa variado
El programa incluye la misa de bienvenida en la Plaza de San Pedro, recorridos culturales, artísticos y espirituales por la ciudad, una jornada penitencial en el Circo Massimo, una vigilia con el Santo Padre en Tor Vergata y la eucaristía final. Será una experiencia profundamente comunitaria, en la que los jóvenes podrán encontrarse con otros creyentes de su edad y con una Iglesia que camina con ello
Una llamada a la esperanza
En un contexto marcado por la incertidumbre y el desencanto, el Jubileo de los Jóvenes quiere ser una respuesta desde la fe. El lema «Peregrinos de esperanza» refleja el deseo de caminar con los adolescentes, ayudarles a descubrir la belleza de la vida cristiana y a confiar en el futuro con los ojos puestos en Cristo.
Aragón se suma a esta gran peregrinación con la alegría de quien sabe que la Iglesia también se renueva cuando sus jóvenes caminan unidos, celebran la fe y se dejan interpelar por el Evangelio. Porque solo así, peregrinando juntos, se construye una Iglesia viva.