El obispo de Tarazona, D. Eusebio Hernández Sola, que cumple 75 años el 29 de julio, ha presentado su renuncia al papa Francisco, de acuerdo al Código de Derecho Canónico. “He puesto a su consideración mi renuncia como obispo de esta querida diócesis de Tarazona por razones de edad, de acuerdo con el canon 401,1”, explica el prelado. La renuncia no es efectiva mientras el Santo Padre no la acepte, por lo que, hasta entonces, monseñor Hernández Sola continúa siendo obispo de Tarazona con todos sus derechos y obligaciones.
“El Santo Padre sabe que cuenta con mi total disponibilidad para lo que la Iglesia necesite y que él juzgue oportuno”, apunta el pastor turiasonense, con “alegre disponibilidad” y confianza: “Estoy seguro de que lo que el Papa decida será lo mejor para mí. Después de ocho años y medio al frente de esta querida diócesis, solo puedo dar gracias a Dios por los dones que de su bondad he recibido viviendo y trabajando pastoralmente en esta Iglesia particular”.
D. Eusebio Hernández ya le adelantó personalmente a Francisco, el pasado mes de junio en Roma, que iba a enviarle esta carta. Una misiva a la que el obispo resta protagonismo, ya que forma parte del procedimiento ordinario: “Continúo junto a mi pueblo con absoluta normalidad. Mientras no se acepte la renuncia, nada cambia. Me siento feliz y agradecido por mis sacerdotes, por los religiosos y religiosas, por los diversos grupos eclesiales y por todos los fieles de la diócesis”.
El obispo de Tarazona trabajó durante 35 años en la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica en la Santa Sede antes de llegar a Tarazona, diócesis de la que fue proclamado obispo el 19 de marzo de 2011 en el Monasterio de Veruela. En este momento, al presentar la renuncia siguiendo la disciplina canónica vigente, recuerda la frase de San Agustín que pronunció al ser propuesto como obispo: “Cuando la Iglesia te pide un servicio, hazlo con humilde corazón”.
